jueves, 7 de enero de 2021

No pidas, ¡haz!

Buenas, 

Constantemente o con cierta asiduidad, te quejas de determinadas situaciones o de la vida en general. Quieres que esa/s situación/es desaparezca/n. Sin embargo, ahí sigues, impasible, sin cambiar, sin hacer nada, sin moverte del punto en el que te encuentras. Consumiendo el tiempo que te queda ideando, soñando, o deambulando, a fin de cuentas vegetando, fantaseando con lo que pudo haber sido y no fue. Y ¿sabes qué ocurre? Las horas, los días, los meses, ¡los años! Pasan. ¿Y sabes qué ocurre? Que todo sigue igual. 

¡Claro! Esperas que eso que te incomoda, o te atormenta cese por arte de magia. Te sientas a verlas pasar. Incluso intentas autoconvencerte con mentiras y engaños, que te sirven como excusas para agarrarte a lo más ínfimo, y continuar sin hacer nada. En esos momentos, puedes llegar a pensar que esa situación/es no es/son tan mala/s, lo cual te conduce a irte adaptando poco a poco a ese malestar. Obvias, pasando entonces por alto que esa situación te incordia, molesta, y/o consume y, consecuentemente, sigues distorsionando la realidad, creyéndote que esa es la vida, y que así debes vivir. Así que ahí sigues, sin hacer nada. 

¿Sabes qué pasa? La realidad resulta aplastante. En el fondo, muy en el fondo de tu corazón, sabes que no quieres eso. Sabes lo que tienes y quieres hacer. Sin embargo, crees que el miedo que sientes frente al cambio, frente a eso nuevo y lo desconocido (¿existe? pulsa aquí para saber más) te paraliza. 

No te das o no quieres darte cuenta que las cosas no se piden, se hacen, ¡claro! Hacerlas entraña un riesgo que no estás dispuest@ asumir, lo cual te hace seguir en esa "rueda" de ratón. Congruentemente sigues quejándote de la vida, del destino, o de... sin ver que el únic@ responsable de ello eres TÚ.

Párate, observa, discierne, actúa y responsabilízate de tu vida.

No pidas querer o que te dejen vivir. ¡VIVE! ¡No pidas, HAZ! ¡Atrévete!

Vivir depende de ti, no lo olvides nunca.


-Equipo Corpus Mente-