Buenas tardes,
Cada día que amanece es como moneda de intercambio que la vida te ofrece para que la utilices de la forma más conveniente que tú creas. Así podrías :
Guardarlas, por miedo a gastar y quedarte sin nada :
Esto se correspondería con no hacer nada en ese día o no responsabilizarte de aquello que te corresponde. No tomando de tal forma las riendas de tu vida, por miedo a unas determinadas circunstancias. Te estarías perdiendo ese día. En éste caso, no vivirías ni tan siquiera estarías sobreviviendo, tan solo permanecerías como un muerto en vida.
Utilizar las monedas en adquirir o hacer cosas que creyeses que te darían bienestar, pero que a la larga te provocarían una pérdida:
Por tanto emplearías el día en cosas que no te llevarían a nada, persiguiendo ilusiones que no son reales, o realizando esfuerzos que no sirven para nada. En definitiva, perderías ese día que la vida te concedió. Te dedicarías tan sólo a sobrevivir, No a Vivir.
Utilizar las monedas en algo que suponga un bien para ti, sin perjuicio de los demás, y que esto perdurase en el tiempo :
Utilizarías el día en lo que verdaderamente tienes que hacer, que no tiene nada que ver con lo que tú quieras, o no quieras hacer, sino con lo que verdaderamente está en tu camino. Para realizar esto tendrías que estar en un punto que te permitiera ver, más allá de las apariencias. Difícil pues. Tan sólo de esta forma Vivirías en ese día.
Hoy es un día nuevo que la vida te ha concedido. Puedes malgastarlo, ó aprovecharlo...
Párate, medítalo e intenta Vivir. Este día acabará hoy y nunca más regresará.
¿Vivirás este día como algo nuevo, o por lo contrario será un día más como siempre?.
¿Qué harás hoy con este día?
Párate, medítalo e intenta Vivir. Este día acabará hoy y nunca más regresará.
*Adaptación del artículo de nuestra compañera y médico Rosario García, puedes seguirla en su Facebook
-Equipo Corpus Mente Sevilla-