"Es sano recordar que no somos producto de una generación espontánea. Realmente somos más antiguos de lo que imaginamos. Somos más que un yo limitado y aislado, somos más que uno mismo.
Si nuestros tatarabuelos vivieran, tendrían aproximadamente doscientos ochenta años, ¡casi tres siglos!
Sus experiencias viven en nuestro ser: Emociones, sentimientos, logros, pérdidas que han atravesado el tiempo, han evolucionado o se han estancado. Experiencias que muchas veces, cuanto más lejanas en el tiempo, más profundamente están grabadas en nuestra alma".
Daniel Dancourt Masias
-Equipo Corpus Mente Sevilla-
No hay comentarios:
Publicar un comentario