Buenos días,
Os dejamos con este pequeño cuento que esperamos os haga reflexionar.
Un discípulo preguntó a su maestro:
"Maestro, quiero ser rico. ¡Dame un consejo!"
"Quieres ser rico?". Respondió el maestro.
"Abre tus ojos, mira y ve el bello color verde del prado que te rodean, abre tus oídos y escucha el murmullo de la brisa en las hojas de los arboles, abre tu nariz y huele el aroma a tierra mojada por el rocío matinal, abre tus manos y siente el frío del día que comienza…
"¡Pero haciendo todo eso apenas seré un poeta y nunca llegare a ser rico!". Respondió enojado el discípulo.
A lo que el maestro sentenció.
"Precisamente, si no lo haces, nunca lo seras; y si lo haces, habrás preparado tus sentidos para reconocer la riqueza en cualquier situación que te encuentres y aprenderás a guardarla para ti".
-Equipo Corpus Mente Sevilla-
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