miércoles, 22 de marzo de 2017

La falsa ilusión de saber

Buenas tardes, 

La etimología de la palabra "pensar" nos conduce a "pendere", que se traduce por colgar o pesar, y en estos dos conceptos basáis vuestra vida. Creáis constantes listas de argumentos que os hacen inclinar la balanza a favor o en contra en la toma de vuestras decisiones, pero ¿qué hay de lo que realmente queréis? 

Como todo en esta vida, nos enfocamos en el exterior, en la consecución de un resultado, objetivo, o meta. Pensáis qué hacer para conquistar al chico/a que os gusta, para lograr un mejor trabajo, para aumentar vuestro nivel de ingresos, o en un plano más espiritual para desarrollaros y ser mejores personas. En resumidas cuentas, pensáis -quizás hasta la obsesión- en qué hacer para conseguir la felicidad, obviando lo más relevante: ¿Eso que ansío, eso que necesito, es real? o ¿es algo que la sociedad, la cultura, la educación o yo mismo me impongo? 

Y es que, en vez de responder a estas preguntas, os seguís centrando en conseguir, conseguir, y conseguir, y cuando no obtenéis lo deseado, hacéis lo indecible para que la consecución de eso que parece, os dará la felicidad, se lleve a cabo, y para ello:

Meditáis, a ver si conseguís calmar la mente...

Visualizáis, actuando como si esa pareja que queréis ya estuviera con vosotros, o ya estuvierais contratados para ese trabajo que ansiáis...

Os esforzáis en cambiar vuestros "malos" pensamientos, por "buenos". Repitiéndoos frases que en lo más profundo de vuestro corazón no creéis...

Etc, etc, etc.

Y al final, vuestro paso por la vida se reduce a la repetición de una serie de patrones que se suponía daban la felicidad, meta utópica e infranqueable que os adormece en aquello que llamáis vida. Y es que claro, como no obtenéis lo que queréis, como la consecución de vuestros deseos no llega al puerto que deseáis, la vida es horrible. 
Os olvidáis de lo básico, y es que eso no es vivir, sino sobrevivir, porque para vivir, hay que abrir los ojos, darse cuenta, tener consciencia, y vosotros estáis aún dormidos. Muchos se preguntan si hay vida después de la muerte, nosotros nos preguntamos si habéis vivido antes de morir. 

Si hubierais ni tan siquiera empezado a vivir, os habríais dado cuenta que nada de lo que percibís es real porque el exterior es captado por el filtro de vuestro mundo interior, y este os hace distorsionar la realidad, llevándoos al engaño, a la confusión, y a la interpretación. Tratáis de explicar con las herramientas que tenéis eso que percibís, pero ¿cómo podéis daros cuenta de lo que ocurre a vuestro alrededor si tenéis los ojos cerrados? Si hubierais empezado a abrirlos, os habríais percatado de esa falsa ilusión de saber que presentáis.  

Por tanto cuando decidáis abrir los ojos, cuando decidáis quitaros la máscara, cuando decidáis dejar de defenderos culpabilizando a los demás, al exterior o a la vida de vuestro pesar, solo y solo entonces, empezaréis a ver la realidad, a daros cuenta de que el origen de nuestros sentimientos o conductas no reside en nuestro pensar sino en nuestro mundo interior.


-Equipo Corpus Mente Sevilla-

domingo, 12 de marzo de 2017

¿Cuál es la causa real nuestros pensamientos, sentimientos y emociones?

Buenas tardes,

Se define el pensamiento como la capacidad que la persona presenta para formar ideas y representaciones de la realidad en la que se encuentra inmersa, lo cual le conduce a establecer determinadas reflexiones sobre las disyuntivas que pudieran acontecer en su vida cotidiana, siendo el pensamiento por tanto, la base de todo comportamiento. 

No debemos olvidar, que el impacto emocional que pudiera generar un hecho debe ser integrado en nuestra mente para ofrecer la respuesta que mejor se adapte a las condiciones que el medio demanda, racionalizando por
tanto esas reacciones, pero...

¿Es el pensamiento el primer eslabón de la cadena? 

No, por consiguiente aunque el pensamiento cambie, la realidad no lo hará. Sólo cambiará la forma en la que aquellos acontecimientos que no deseas vivir se presentan, sólo cambiarán tus interpretaciones. Pero el fondo, lo profundo, lo latente, lo escondido, seguirá ahí. Seguirá siendo el mismo, y por tanto con el tiempo, te darás cuenta que aquello que parecía haber cambiado, nunca lo hizo. 

Entonces, ¿cuál es la causa real nuestros pensamientos, sentimientos y emociones?

Con el fin de responder a estas y otras cuestiones, os invitamos a nuestra próxima conferencia.


Dirección: C/Águila Perdicera, edificio México, bloque 3, 2-D 
(marcar en el porterillo 2324 campana)

18 de Marzo. Hora: 17:00 

Teléfonos: 660506265 / 650514925

PRECIO: 30€

miércoles, 1 de marzo de 2017

¿Encuentros o atracción?

Buenas tardes,

En alguna ocasión habréis escuchado que podemos atraer a nuestra vida las cosas que deseemos tan sólo con pensar en ellas. Prueba de ello es la existencia de personas que afirman sin ningún género de dudas que ellas lo han vivido en primera persona, apelando por su parte a la utilización de técnicas, o trabajos que han realizado con el fin de cambiar pensamientos, creencias, actos, etc. De tal forma ello les ha permitido dejar de crear o de atraer la realidad que no les gusta, y cambiarla por una que sí les hace felices.

Lo anteriormente descrito, sería como decir que un elefante se presenta en nuestra vida porque lo hemos creado o atraído. Así, el elefante no existía pero nosotros con nuestro pensamiento lo hicimos posible.

También cabe la posibilidad de que el elefante existiese estando por tanto en un determinado lugar, por ejemplo, en la India y nosotros con nuestro pensamiento, lo hemos atraído hasta donde nos encontrábamos. 

Lo comentado en el primer párrafo puede otorgar cierto control sobre la realidad, ya que simplemente se deben seguir unas determinadas pautas para conseguir lo que se desea. Lo cual podría permitirnos justificar lo que aparentemente no tiene una explicación. 

La realidad es que el elefante está en nuestra vida simplemente porque nos lo hemos encontrado. Ni lo hemos atraído, ni lo hemos creado. Es un "encuentro", pero ello no es casual, tiene su razón de ser. No obstante, ello os deja sin control, pues no sabéis el porqué.

Los encuentros con situaciones, personas y demás son necesarios en la vida. No son ni malos ni buenos, son simplemente "encuentros" que están ahí por una razón.

Párate ante esos encuentros. No quieras cambiarlos. No quieras echarlos de tu vida. No huyas de ellos. Entérate por qué están en tu vida. Sólo así comenzarás a ver la realidad.



-Equipo Corpus Mente Sevilla-