Los opuestos: el camino que te conduce al mismo lugar

Buenas, 

Los opuestos aparecen como contrarios, pudieran resultarlo en la forma de presentarse, no obstante, en el fondo son lo mismo.

Una persona puede no saber enfrentar un determinado acontecimiento, y debido a ello sufre, y se enredas cada vez más. Otra persona si consigue afrontar. Por tanto, no sufre, y en apariencia todo ha terminado. Si se pudiera realizar un seguimiento de ambas, se podría ver a lo largo de su trayectoria que al final llegaron al mismo punto.

Quien no enfrenta se encontrará con las mismas situaciones de las cuales huirá. Quien aparentemente afronta, sólo lo hace en apariencia, por tanto su enfrentamiento, también resulta una huida. Por ello se seguirá encontrando con las mismas situaciones. Quizás, diferentes en cuanto a la forma, pero en el fondo, iguales.

Desde ahí, no hay solución porque te dedicas a solucionar (o no) lo que te encuentras. Tu foco de atención se centra en eso, tu vida gira entorno a dar arreglo a los acontecimientos que te incomodan. Obvias que lo que te ocurre tiene que ver con algo escondido en lo más profundo de ti mismo, de lo cual es imposible escapar. Sólo mediante un proceso interior podrás salir de los extremos. No es ser bueno o malo. No es ser positivo o negativo. El positivo es la tapadera del negativo.

Negativo: soy malo, no valgo para nada, no me quieren, no sé hacer, etc.

Positivo: debo hacer cosas para superarme, ser bueno, hacer bien las cosas, ayudar a los demás, etc.

Lo que hay en el fondo de cada extremo es lo mismo. El negativo revela la realidad que existe. El positivo es la huida de esa realidad. No vayas de un extremo al otro. Intenta salir de esos extremos.

¿En qué punto del tiempo de quedaste estancado?

Buenas, 

Puede que vivieras un acontecimiento, y te quedaras colgado de él. Como no sabes la realidad del mismo, ya que sólo eres consciente de lo que ves creyendo que esa es la realidad, realizas movimientos que sólo te conducen a un callejón sin salida.

¿Qué ocurre tras dicho acontecimiento?

Sigues permaneciendo ahí. Puede que hagas cosas que te hagan pensar que estás saliendo. A pesar de ello, después de un tiempo te darás cuenta de que esto no es así.

A partir de ese suceso del cual te quedaste colgado, te encontrarás en tu vida con otros acontecimientos que serán iguales a él. Puedes que los veas diferentes en cuanto a la forma: personas, lugares, etc. No obstante, el fondo seguirá siendo el mismo.

La mayoría de las veces ese acontecimiento comienza en la infancia. Se culpa a la familia, a los padres, al profesor, al primer amor, etc. No obstante, nada de eso es verdad. Ahí es donde se manifestó, pero ¿Por qué? Podrás decir: "porque mi madre era...", "porque esa persona era...". A pesar de ello, nada de eso es verdad. La realidad se encuentra más allá de ese exterior en el cual te quedas.

Al no saber realmente las respuestas, tan solo inventas, e interpretas, te quedas en la apariencia, y esto te hace crear una gran película de la cual tú eres el protagonista principal. Conviertes por tanto la vida en eso: una película.

Debes conocer la realidad profunda que se oculta tras esa obra de teatro a la que llamas vida. Sólo así tendrás la posibilidad de comenzar a salir de la misma, y quizás... vivir.

Tienes miedo

 Buenas, 

"Se que estáis ahí, 

Percibo vuestra presencia, 

se que tenéis miedo. 

Nos teméis a nosotros, teméis el cambio. 

Yo no conozco el futuro. 

No he venido para deciros como acabará todo esto. 

Al contrario, he venido a deciros cómo va a comenzar.

Voy a colgar el teléfono, 

y luego voy a enseñarles a todos lo que vosotros no queréis que vean.

Les enseñaré un mundo, sin vosotros. 

Un mundo sin reglas y sin controles, sin límites ni fronteras. 

Un mundo donde cualquier cosa sea posible.

Lo que hagamos después es una decisión que dejo en vuestras manos."

*Discurso final de Neo en la película Matrix 1999.

¿Existe la salida?

Buenas, 

Naces, y comienzas a vivir acontecimientos. Algunos de estos pueden marcan tu vida hasta tal punto, que de una u otra forma, se repiten a lo largo de tu existencia.

¿Por qué te encuentras con estas situaciones? ¿Por qué se repiten?

Puedes pensar que lo que te sucede es fruto de la mala suerte, que la vida es injusta, que todo es por el karma, pero nada más lejos de la realidad. Creer y actuar según esto, sólo te conducirá a un callejón sin salida.

Reaccionas, pensando que ello se debe a lo que te ha pasado. Sin embargo, esta respuesta es fruto de algo que está más allá de lo acontecido, algo que es invisible a tus ojos. Lo que te sucedió es lo que tienes delante de ti, pero más allá de eso, hay una historia tuya que es la que hizo que te encontraras con esos acontecimientos.

Y... ¿Por qué se repiten esas situaciones?

Porque en su momento no supiste salir de ahí. Salir de la historia que estaba más allá de lo que sucedió. Buscabas una salida, pero en vez de encontrarla te enredaste más. Al no saber esto, das soluciones inútiles a lo que te está pasando, encontrándote al final en un callejón sin salida. 

La salida existe, pero no está en el mundo exterior, conocido por ti. La salida está fuera de todo lo que conoces, y comienza en esa historia que está más allá de lo que te sucede. Debes comprender lo que realmente está pasando, y desde ahí realizar tu proceso.

Desde la oscuridad en la que habitas, la salida jamás será posible.

La responsabilidad

Buenas, 

Responsabilidad, del latín  responsāre, que significa responder de...

La responsabilidad entonces, sería considerada como la respuesta que tienes que dar a lo que es tuyo. Es algo que tienes que hacer tú, y no los demás, pues entonces no te estarías responsabilizando.

Hay distintos niveles. En el más básico te encontrarías con lo que hay en el mundo exterior. Trabajar, estudiar, hacer la comida, limpiar, etc. Eres tú el que tiene que buscar el trabajo, eres tú el que tiene que estudiar, eres tú el que tiene que preparar la comida, o limpiar tu casa. Si no haces esto, se diría que no te responsabilizas de lo más básico. 

Podría suceder que los demás son los que te preparan el terreno, empujándote, diciéndote, motivándote. En este caso, el otro no te estaría ayudando, pues asume responsabilidades que no son suyas, invadiendo así tu camino. Por tanto, ninguno se responsabilizaría de lo que le concierne.

Existe un nivel de responsabilidad medio. La responsabilidad de ti mismo, y de tu vida. Tú y sólo tú eres el que debe dar respuesta a todo lo que ocurre en tu vida, y hacerte cargo de tus pensamientos, emociones, y conductas. No obstante, rara vez te responsabilizas de esto, más bien prefieres culpabilizar al exterior (los demás, la mala suerte, el destino, el Estado, etc) de lo que te sucede. 

En este nivel, no se debe confundir la auto-culpabilidad con el responsabilizarse, pues no tienen nada que ver. 

Finalmente, en un nivel más profundo, te encontrarías con la responsabilidad de todo lo que hay dentro de ti: "el mundo interior", que nada tiene que ver con los pensamientos, y/o emociones. Es imposible que te puedas responsabilizar en este nivel sino sabes ni tan siquiera que existe. 

El nivel en el que te encuentres será tu punto de partida para empezar a asumir esa responsabilidad.

Con motivo de tratar estas y otras cuestiones, os invitamos al próximo seminario que tendrá lugar el 3 de febrero a las 17:00h.

Información y reserva: 650 514 925 / 660 506 265